lunes, 20 de febrero de 2017

Literatura Bdsm - Dominique Aury

Dominique Aury





Dominique Aury, tímida intelectual y escritora francesa cuyo nombre real era Anne Desclos, autora de Histoire d'O (Historia de O) bajo el seudónimo dePauline Réage, la novela erótica prohibida durante años que marcó la década de los 60. Falleció a los 90 años el 30 de abril de 1998.









Historia

Nacida el 23 de septiembre de 1907, en Rochefort-sur-Mer, Charente-Maritime, Francia, Aury reveló a los 86 años a una revista estadounidense que las aventuras de O fueron escritas con un gran objetivo: conquistar, desde su lecho de enferma, al autor del prólogo, Jean Paulhan, con las armas literarias que le merecían más confianza que la juventud y la belleza que no creía poseer. Este libro maldito dio la vuelta al mundo, a veces clandestinamente, y fue coronado en 1955 con el prestigioso premio literario francés Les Deux Magot. Histoire d' O quedó popularizada aún más por la película de Just Jaeckin, protagonizada por Corinne Clery.


Seudónimo de Anne Desclos, escritora francesa. Aury comenzó su carrera como periodista y escribió también una Antología de la poesía religiosa (1943), Lecture pour tous (1958) y Traité des jours sombres (1992). Además, tradujo al francés a varios autores, entre ellos Mishima y Evelyn Waugh. Durante la ocupación alemana había sido una activa resistente y fue durante décadas una influyente representante del mundo literario francés. Historia de O, su libro "maldito", que escribió bajo el sobrenombre de Pauline Réage, dio la vuelta al mundo, a veces clandestinamente, y fue coronado en 1955 con el premio literario de los Deux Magot. La identidad de su autora fue un misterio hasta 1994, fecha en la que la desveló en una entrevista en The New Yorker.


Aury, eminente figura de la literatura francesa, fue traductora, crítica de cine y editora, siendo la única mujer que se sentó en el comité de evaluación de la editora Gallimard, además de miembro de la Légion d'Honneur. El Gobierno de Francia anunció recientemente que será incluida en una lista de orgullos nacionales.

Dominique Aury, acostada en su cama con un lápiz y su cuaderno de colegio, no pensaba en publicar sus escritos. Escribió como un desafío, una empresa que emprendía para conquistar más a su amante, Jean Paulhan, al que conoció durante la ocupación alemana, cuando ella distribuía una revista llamada Lettres Françaises. Pese a ello, su obra marcó el nacimiento de una nueva subcultura: la del BDSM. Durante largas épocas de su vida, fue una activa militante a favor de la bisexualidad femenina

Dominique Aury, alias Anne Desclos.

Esta ancianita de aspecto afable y que podría ser la abuela de cualquiera de nosotros es la autora que se esconde detrás de un seudónimo tras el cual hay otro, de nombre ambiguo (para despistar sobre su género y proteger a su familia).

Metida ya en los cuarentaytantos, Anne llevaba ya un par de décadas siendo la amante de Jean Paulhan, con quien trabajaba en una editorial en Francia. Tras ese tiempo notó que su querido Jean empezaba a perder el interés en ella y, por si fuera poco, él le dijo que no creía que ninguna mujer fuera capaz de escribir algo similar a lo que hacía su admiradísimo Marqués de Sade.

Y sí, muchos nos movemos por el clásico "¿que no hay huevos? ¿Que no hay huevos? ¡Vas a ver tú si hay huevos...!". Escribió "Historia de O" para él, para recuperarle, apelando directamente a algo en lo que ninguna jovencita pechugona podía competir con ella, uniendo de esta manera las fantasías de ambos. Naturalmente, le gustó. Prueba de ello es que no sólo publicó la novela sino que además escribió un prólogo que deja bien clarito lo orgulloso que estaba. Y sin cosas tipo "¿la veis? ¡pues es mía, míaaaa!", que todo se hace desde el buen gusto (*Risas*).

Fue preciso mentir, no hablar, disimular y esquivar durante décadas a los periodistas, que no dejaban de acechar intentando averiguar el nombre real del autor. En parte, por la familia de ella; en parte, por la de él (que estaba casado), y supongo que en parte también porque cuando una escribe una de las mayores obras de la literatura erótica de todos los tiempos prefiere que nadie le pueda poner cara. Por si acaso.

Años después, cuando Anne tenía ya 81 años y estaba próxima su muerte, concedió una famosa entrevista en la que desvelaba al mundo su secreto. A fin de cuentas, Jean llevaba muerto ya veinte años (lo que no quita que los ojillos le brillaran hablando de él), y tampoco quedaba nadie ante quien avergonzarse. Hasta su hijo opinaba que era un buen libro. El shock no fue tanto que lo hubiera escrito una mujer (porque creo que se nota, se nota muchísimo al leerlo), sino que era mujer de aspecto sencillo, sin maquillaje, sin joyas, sin escándalos: una persona completamente normal... en apariencia.


Historia de O

Dominique Aury, de Angie David - Editions Léo Scheer, - isbn 2756100307
Dominique Aury, biographie, de Angie David, Editions Léo Scheer, 2006 - isbn 2-7561-0030-7


 Historia de O nos narra cómo y por qué una joven y hermosa parisina se inicia en una forma de esclavitud sexual muy próxima al sadomasoquismo. Inducida por su amante se someterá al rito de la sumisión, aceptando por amor todo lo que ello implica. La novela comienza cuando O es conducida por su amante al castillo de Roissy, donde una especie de sociedad secreta se encargará de iniciarla en este rito.

Esta novela, que en un principio no nació como tal, sino que fue escrita por su autora con el único ánimo de divertir y excitar a su amante Jean Paulhan, y como un desafío para conquistarle aún más, se ha convertirlo hoy en día en todo un clásico del género.

Es una obra sería, de gran intensidad erótica, con una trama bien entretejida, donde, la autora nos muestra sus fantasías con un gran alarde de imaginación, abordando el erotismo y la sensualidad de una forma sorprendente.




A pesar de su contenido sadomasoquista, donde abundan las cadenas, los azotes, y las humillaciones, la novela no horroriza ni estremece en ningún momento al lector, ya que está escrita con una prosa elegante y sutil, reducida a lo esencial y sin elementos sobrantes.

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